¿De la mano de quién?
El diseño y la oportunidad de consumirlo, es cada vez una necesidad que llega a más personas y empresas. Hoy el interiorismo como diseño, forma parte de cubrir la necesidad de existir de las personas más allá de una necesidad básica con un sentido de eficiencia y de vivir con calidad.
Por lo anterior, es frecuente encontrarse con la interrogante sobre cuál es la diferencia entre los 3 profesionistas expertos en brindar una solución para un espacio o inmueble y cuándo es que se necesita de cada uno de ellos.
A continuación te presento la diferencia entre Arquitecto, Decorador y Diseñador de Interiores para su intervención en el momento adecuado.
ARQUITECTO
La arquitectura es la disciplina encargada de crear espacios a través del levantamiento de edificaciones, para esto se requiere conocer desde cálculos, uso de materiales y algunos otros conceptos, es un arte en donde la creatividad forma parte importante.
De esta manera, el arquitecto se caracteriza por proyectar, diseñar, dirigir la construcción y el mantenimiento de: edificios, urbanizaciones, ciudades y estructuras de diversos tipos.
Su razón principal es reflexionar sobre conceptos del “habitar” y las necesidades sociales, puede combinar entre sus formaciones algunas técnicas artísticas y creativas.
DECORADOR
Por otro lado, el decorador no manipula el espacio o la estructura del mismo, simplemente se encarga de vestir a través del uso de mobiliario, textura y acabados, las diferentes habitaciones de un inmueble.
En resumen, aconseja a su cliente sobre el estilo de los muebles y otros objetos de decoración tales como: el color y textura de la tapicería, la pintura de las paredes y el techo. Logra su trabajo interpretando los entornos creados por el arquitecto o el diseñador de interiores, dándoles forma a su manera para reflejar un estilo.
DISEÑADOR DE INTERIORES
Sin embargo, el diseñador de interiores sí manipula el espacio interior, pudiendo hacer modificaciones en algunos casos. Juega con la estructura y se encarga no solo de la decoración sino también de la adecuación de los diferentes elementos para hacer un espacio totalmente funcional.
El diseño de interiores, es una disciplina proyectual que involucra el proceso de mejorar la función y cualidades del espacio interior con la manipulación del volumen espacial, así como del tratamiento superficial, materiales y objetos, es decir, crea la ambientación de un espacio a través de la colocación de objetos, texturas, iluminación y colores, los cuales trabajan en forma armónica brindando una sensación agradable a la vista en donde cada persona disfruta del ambiente deseado.
De esta manera, su alcance es superior a la decoración, ya que indaga en aspectos más amplios como: la psicología ambiental, la arquitectura y el diseño de espacios, generando un valor agregado al proporcionar bienestar a la salud física, mental, emocional y espiritual de las personas.
Recordemos que… “Todos los espacios tienen una razón del SER”.
